sábado, 18 de abril de 2015

La lechera

       La lechera

Encuadre:


  • Obra: La lechera
  • Autor: Vermeer
  • Año de creación: 1658-1660
  • Género: pintura
  • Estilo: pintura barroca holandesa
  • Otras obras del autor: Vista de Delft, La joven de la perla...




Descripción:

La lechera se trata de un cuadro realizado al óleo sobre un lienzo de pequeñas dimensiones (44,5 x 41 cm), por el pintor holandés Johannes Vermeer entre los años 1658 y 1660, y expuesto actualmente en el Riijksmuseum de Ámsterdam (Holanda).

En la imagen, podemos observar el edificio en el que se encuentra expuesta la pintura en la actualidad.







Pasando a la escena, podemos observar en la esquina de una habitación a una mujer, probablemente una criada, por su forma tan característica de vestir, vertiendo leche en el recipiente de barro que se encuentra sobre la mesa, destacando también en un primer plano una cesta con unos pedazos de pan.

Este cuadro, muestra unas caracteristicas propias del estilo de Vermeer, que nos servirán para hacer un análisis más profundo de la pintura, entre las que destacan:


  • Realización de la obra en un lienzo de pequeño formato, como ya se ha mencionado al principio de la descripción. 
  • Vermeer ha querido representar con esta pintura una escena de la vida diaria de la burguesía, ambientada en el interior de una vivienda.
  • El interior, en este caso una cocina, podemos ver que no es excesivamente lujoso, sino más bien lo contrario, pero posee todo lo necesario y para ser un entorno agradable y austero.
  • La figura se encuentra perfectamente definida por el dibujo y el empleo de una luz suave, en este caso procedente de la ventana situada a la izquierda. 
  • Por otro lado, apreciamos un colorido alegre, contraste entre amarillo y azul de los ropajes de la muchacha, que contribuye a hacer las composiciones más atractivas y menos sobrias.
  • Para finalizar, cabe mencionar la serenidad en el rostro de la joven, que representará el gusto de este pintor por el sosiego y lo sencillo.



Contexto histórico:

Nos encontramos en el siglo XVII, en el cual se produjo una fuerte crisis en Europa, tanto política, como social y económica.
Por otra parte, estalló la Guerra de los Treinta Años, conflicto que tuvo su origen en Bohemia, debido a la profunda división religiosa existente, y con escenario principal en los Países Bajos. Pero, en 1648 se finaliza este largo altercado con la Paz de Westfalia, la cual estableció un nuevo orden europeo vigente hasta el siglo XIX, y caracterizado por diversos aspectos como la aparición de los Estados, crisis en la autoridad papal, hegemonía de Francia, libertad religiosa...
Más tarde, debido tanto a la interminable sucesión de guerras como a las malas cosechas, que provocaron un descenso en la población, se produjo una crisis durante el siglo XVII, afectando sobre todo a la zona más meridional del continente, mientras que hechos como el auge del comercio y la aplicación de nuevos rudimentos y técnicas en la agricultura, lograron mantener una situación más estable en el resto de Europa.
Por último, se produce desde el siglo XVIII, la transición desde el Antiguo Régimen a la sociedad contemporánea, con bases como el desarrollo de la actividad industrial y comercial por el aumento de producción y el incremento del nivel de vida; la sociedad, que seguía siendo estamental, logró traer consigo una creciente heterogeneidad basada en criterios monetarios y también, otras muchas novedades políticas a parte de la implantación en Europa de las monarquías absolutistas.



martes, 3 de marzo de 2015

Madonna del cuello largo

Madonna del cuello largo

Encuadre: 


  •  Obra: Madonna del cuello largo
  • Autor: Parmigianino 
  • Año de creación: 1535-1540
  • Género: pintura 
  • Estilo: pintura manierista 
  • Otras obras del autor: Los esponsales de Santa Catalina, La conversión de san Pablo...







Descripción:

Madonna del cuello largo se trata de una pintura al óleo realizada sobre un lienzo de considerables dimensiones (216x123 cm) por el pintor italiano Parmigianino, y perteneciente, por lo tanto, al Manierismo entre los años 1535 y 1540. En la actualidad, se puede encontrar en la Galería de los Uffizi, en Florencia. 

Centrándonos más en el contenido del cuadro, se puede observar una Virgen con el Niño apoyado sobre su brazo izquierdo, rodeados ambos de otras cinco figuras que representarán ángeles. 
En primer lugar, en cuanto al la Virgen, destacan los elegantes y amplios ropajes que lleva, así como un rostro que muestra una sensación de paz y serenidad frente al Niño que posee en su regazo.
Por otra parte, y como se ha mencionado anteriormente, se encuentran en el lienzo figuras angelicales divididos en tres filas, en las cuales los dos que se hallan en la primera, observano con detenimiento tanto a la Virgen como al Niño. Los dos posteriores presentan una posición curiosa, ya que el situado en el lado izquierdo parece mirar a otro lado mientras el de la derecha no quita ojo a los protagonistas. Y por último, el ángel situado en el fondo, casi inapreciable su presencia, que parece estar fijándose en la parte derecha de la pintura. 

En la imagen se muestra un plano más detallado de las posiciones de los ángeles. 













En este lienzo se dejan ver claramente las características del Manierismo, como por ejemplo: 

  • La deformación que se ha aplicado a las figuras, estilizadas y engrandecidas  (figura serpentinata), como en el caso de la Virgen, que presenta un cuello con una longitud bastante considerable, así  como el gran tamaño del Niño, que dejan a los ángeles con un tamaño bastante inferior en relación.
  • Introducción de otros elementos de carácter anécdotico, en este caso, una serie de columnatas situadas a la izquierda de la Virgen en la que también aparece una figura de un tamaño muy reducido, que representa a San Jerónimo, el cual está en la obra por su veneración hacia la Virgen María. 
  • Y por último, pasando al tema de la luz, destaca la marcada e intensa iluminación que se otorga a los personajes principales, en contraposición con una menor intensidad en el resto del cuadro, así como los colores granate y azul que pretenden dar ciertos matices fantásticos y fuera de lo común. 
Para finalizar el comentario de la obra, es preciso mencionar que al morir Parmigianino en 1540, el lienzo quedó inacabado, y notándose fundamentalmente en el rostro de algún ángel, pero que tras ser restaurado, es prácticamente una verdadera obra de arte que marcó un antes y un después en el movimiento manierista. 







En la fotografía aparece la Galería de los Uffizi, situada en la ciudad italiana de Florencia, lugar que alberga esta importante obra en la actualidad.


Contexto histórico:

Durante el S.XVI, se desarrolló un pensamiento humanista, que se difundió rápidamente gracias a la creación de la imprenta. Paralelamente, se desarrollaron otras corrientes como el heliocentrismo. A su vez, los nuevos descubrimientos, en especial el de América, lograron aumentar el poder de las monarquías autoritarias, que desencadenará en que dichos monarcas autoritarios se conviertan en uno de los principales objetos de estudio. 
En cuanto a la Iglesia, surgieron varias críticas tanto dentro como fuera de ella, que se enmarcaron en la llamada Reforma Protestante. 
Pasando a la sociedad, continuaba siendo estamental, con una burguesía que cada vez aumentaba más su riqueza. 
Por último, en cuanto a Italia, destacó la familia de los Médicis, que hizo a Florencia mantener su importancia política, y la cual fue conocida por adquirir ciertas obras de pintores de renombre. 

lunes, 8 de diciembre de 2014

Iglesia de San Juan de Baños


Iglesia de San Juan de Baños


Encuadre


  • Obra: Iglesia de San Juan de Baños (Palencia)
  • Género: arquitectura
  • Estilo: arte visigodo 
  • Cronología: S.VII-S.XIX
  • Otros edificios relacionados: Iglesia de Santa Comba de Bande (Ourense), iglesia de San Pedro de la Nave (Zamora)...
Descripción

Se trata de una iglesia visigoda situada en la localidad de Baños de Cerrato, a 7 km de Palencia. Está considerada como una de las iglesias más antiguas y mejor conservadas de España. 
Este edificio se encuentra construido en piedra, concretamente en sillares perfectamente apilados,  en los que se observa una elevada calidad de los materiales empleados.
La planta es basilical, con 3 ábsides y 3 naves, separados por arcos de herradura, cubiertas por techumbres de madera,  con ábside cuadrangular cubierto por una bóveda de herradura y 2 estancias a ambos lados de la cabecera,  una con función de baptisterio y otra de capilla.

En la imagen, podemos ver el tipo de arco utilizado, en este caso, de herradura.


Pasando a analizar la puerta de entrada, es visible que el extradós de las dovelas no sigue paralelo al intradós con un espesor irregular.

Imagen de la puerta principal de la iglesia, posteriormente restaurada, pero tratando de mantener al máximo su aspecto originario. 


Dejando atrás la parte externa, pasaremos a analizar el interior, en el que se pueden observar los arcos visigodos sobre diversas columnas de mármol. En cuanto a los capiteles, hay una peculiaridad en este edificio, y es que sólo uno de ellos es auténtico corintio romano, y los demás, imitaciones realizadas en la época visigoda.





Imagen del interior del templo, en que es curiosa la poca iluminación que hay dentro del mismo.

Y por último, es interesante analizar también la fuente de San Juan, situada justo al lado del templo, por lo que se puede afirmar que es parte de él. Se encuentra a su derecha,  formando una pequeña terraza hacia el río Pisuerga. Es también conocida como fuente de Recesvinto, fundador de la iglesia, ya que se creía que dicha fuente le devolvió la salud al monarca. Actualmente, se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de España. Respecto a su construcción, se haya formada por 2 arcos de herradura que acceden a un depósito en el cual brota el manantial. Es una de las pocas obras visigodas conservadas prácticamente en su totalidad, cosa que nos indica la buena calidad de construcción de este conjunto arquitectónico.



Se puede apreciar de manera muy clara los 2 arcos que conforman esta fuente, protegidos con rejas, que fueron añadidas, lógicamente, después para su correcta conservación. 

Contexto histórico

El reino visigodo, formado por la unión de visigodos e hispano - romanos, constituyó un fuertemente poder. Durante su transcurso, grandes ciudades crecieron aún más, como Emérito Augusta, Tarraco... todas ellas con grandes edificios religiosos de elevada calidad e importancia. Pero, no todos ellos han llegado a nosotros,  conservándose únicamente aquellos que se encontraban en una situación más aislada.

jueves, 16 de octubre de 2014

Cuevas de Cogul

Cuevas de Cogul.
  • Obra: Cuevas de Cogul.
  • Género: pinturas rupestres realizadas sobre los abrigos rocosos de un yacimiento.
  • Estilo: arte rupestre de la prehistoria (arte levantino).
  •  Cronología: Mesolítico (se ha demostrado que fueron utilizadas desde el año 7000 al 100 a.C.).







Descripción breve del lugar:
Las cuevas de Cogul, también conocidas como la Roca de los Moros, se trata de uno de los yacimientos mas importantes de la prehistoria, concretamente del arte levantino. Se trata de una cavidad de unos 10 metros de ancho, 3 de hondo y 4 de alto. Se encuentra situada a unos 20 km de de Lérida, en una zona que fue bastante transitada por la población durante la Prehistoria, por lo que se puede afirmar que se trata de una zona muy rica arqueológicamente. En su interior, nos encontramos con varias representaciones artísticas que veremos a continuación en el siguiente apartado, las cuales poseían un rico carácter significativo para las muchas generaciones que poblaron esos territorios catalanes.

 
En esta imagen, podemos observar la localización de dichas cuevas, como se ve, cerca de núcleos urbanos de vital importancia en la antigüedad.











 Comentario sobre las pinturas de su interior:
En el interior de este yacimiento, se encuentra un total de 48 figuras humanas y animales.
Una de las pinturas rupestres más representativas es la llamada "danza fálica", una pintura que cumplía las características de este tipo de arte, es decir, figuras esquemáticas que hacían alusión a festividades posiblemente de culto o religiosas. a continuación, una imagen de dicha pintura:

 

 Podemos ver claramente cómo una serie de mujer danzan alrededor de una figura masculina, que aportaría el carácter fálico de esta pintura. Llama la atención el contraste entre los colores de las figuras centrales con las de los extremos, así como la aparición en segundo plano de la figura masculina, que aporta al papel femenino un protagonismo mayor en la pintura.








Partiendo de aquí, encontramos otras representaciones sobre la roca del yacimiento, como por ejemplo 
estas dos figuras de animales, que ya empezaron a darse en esta época artística. Vemos como va cambiando la perspectiva del animal de una foto a otra, representándose en la primera imagen el perfil del mismo, pero en la segunda, se percibe cierto cambio de perspectiva, mostrando una parte de la trasera de éste.
En este caso, sí que se trata de una pintura monocroma, es decir, de un sólo color, dando paso a un tipo de pintura rupestre más convencional y simple, pero el cual perdurará miles de años como expresión de la cultura levantina de la época.




Y finalmente, para concluir, cabe destacar 
la representación pictórica de la fotografía situada
a la derecha, en la que encontramos, como era
de esperar en esta época, una pintura sobre la ac-
tividad  más importante, la caza.
Aunque no se percibe con mucha claridad, podemos percatarnos de una serie de figuras humanas que se hayan a la caza del animal situado en la parte superior izquierda.



Contexto histórico:

La temática representada en las pinturas de esta cueva estaba claramente enfocada con los ideales de la cultura levantina del Mesolítico, el cual se desarrolló en la zona oriental de la península, y que posteriormente fue extendiéndose por más territorios costeros, desde Lérida hasta casi Almería. Cabe destacar la importancia del papel masculino dentro de la sociedad levantina de la época, así como el tema de la fertilidad. Pero no se puede olvidar que estamos hablando de un periodo de tiempo en el que la caza era una de las actividades más representativas, debido a que se trataba de la manera de sobrevivir en esa época, así como un rasgo cultural propio de la mentalidad prehistórica.